Martes, 12 Agosto 2014

Festival Binacional de Enogastronomía, Rivera - Santa Ana do Livramento

Por primera vez se realizó en la Frontera de la Paz un festival binacional de Enogastronomía. Como dice el intendente de Rivera Marne Osorio, la frontera es una gran ciudad con dos barrios, Rivera y Santana Ana do Livramento.

por Rossana Crosta

Ésta integración quedó de manifiesto con la gran participación de brasileros que llegaron no sólo de Livramento sino desde otros puntos de Rio Grande Do Sul.

El objetivo de este encuentro que se llevó a cabo del 30 de julio al 9 de agosto, fue  conocer, apreciar y saborear el potencial enogastronómico de la frontera, la cultura alimenticia que le da identidad a esta región que une a dos países.

En las instalaciones del  nuevo  Hotel  Rivera Casino & Resort, un lugar que está aportado y mucho al turismo de eventos y conferencias en esta ciudad; renombrados chefs de Brasil y Uruguay participaron de “aulas show” utilizando recetas e insumos regionales.


En este lugar también se realizó del 6 al 9 de agosto el fórum  del festival, donde disertaron diversos especialistas en comidas de frontera, en productos regionales  como el aceite de oliva y el vino y en las nuevas tendencias de  alimentación, como el movimiento Slow Food.

Siete restaurantes de Santa Ana y siete restaurantes de Rivera formaban el circuito gastronómico del evento, ofreciendo a sus comensales, platos típicos de frontera, acompañados con un vino de la zona. Quienes pudieron degustar dichos platos recibieron de regalo una copa  con el  logo del Festival.

Ustedes se preguntaran…cuáles son los platos de frontera?

Tuvimos el placer de degustar muchos de ellos y les aseguramos que sus sabores despiertan el paladar de cualquiera, invitan a una exquisita experiencia innovadora aunque manteniendo los ingredientes típicos que los caracterizan y le brindan identidad.

Entre las carnes por ejemplo, la más consumida fue el cordero, que se prepara en guisos, o a la parrilla, servido con salsa de  vino tannat y boñiato acaramelado (exquisito!!!!). También pudimos degustar los sorrentinos de cordero, otra forma de conocer las posibilidades y combinaciones de esta sabrosa carne.

Una de las vedette por supuesto fue la famosa feijoada, poroto negro en salsa con diversas carnes, que se sirve con arroz blanco.
Otro plato muy conocido fue el charque, (carne salada seca) que se come en guiso con arroz.

Por supuesto y no menos importante estaba la parrilla, el churrasco o picaña, acompañado con fariña, pirón o harina de mandioca.
Como postres, conservas de diferentes frutas como kinoto , butiá o maracuyá ,  la ambrosía ( con base de huevo,  y azúcar) y el famoso Riverí, parecido al chajá de Paysandú.

La mayoría de los productos que son parte de estos platos, se expusieron en varios stands en la misma línea internacional, por parte de la Asociación de Productores de Rivera y de Livramento.

Con respecto a los vinos, pudimos comprobar  que la vitivinicultura en Rivera viene  en franco crecimiento, mejorando la calidad de sus productos, que por supuesto tienen como principal mercado Brasil. Pudimos comprobar esto en nuestra visita a la bodega artesanal 636, así como también la recorrida  por la  famosa Bodega  de Carrau en Cerro Chapeu. Las visitas a las bodegas  fueron parte del evento Enograstronómico, al igual que las degustaciones.

Todo este mega evento que se desarrolló en nueve días y demandó un gran trabajo de equipo fue organizado por la Dirección de Turismo de la Intendencia de Rivera y la división turismo de la Prefeitura de Santa Ana, con el apoyo de Porto Alegre.

El Director de Turismo de la Intendencia de Rivera, Enrique Puentes fue un actor fundamental en este evento y  participó activamente de toda la organización en cada jornada, al igual que su equipo, al cual queremos agradecer por la hospitalidad y la buena disposición  en cada requerimiento que le hacíamos llegar para cumplir nuestro trabajo.

Rivera sigue siendo un ciudad muy atractiva para el turismo de compras , y pudimos apreciar el crecimiento comercial, con la instalación de grandes superficies de free shop y el avance de lo que será el gran Shopping Melancía; pero también es una ciudad para degustar y deleitarse con la buena gastronomía, mezcla de varias  culturas, de dos países , con la mixtura de sabores y colores  que vienen desde el pasado, con recetas de la abuela que no se han perdido y se ofrecen en el renovado y calificado circuito gastronómico riverense.

Sin duda que este evento contribuyó  a  revalorizar la  cultura gastronómica de frontera y atraer a un turista, muchas veces  desconocedor y ajeno a  estos sabores.

Así como lo expresó el Director de Turismo Enrique Puentes, este sin duda fue  el primero de muchos eventos binacionales de este tipo que se desarrollen en Rivera y que sean también un sello de identidad, como una nueva opción de turismo gastronómico en “una ciudad con dos barrios” donde habitan 200.000 habitantes.

Una recomendación más...cuando visiten Rivera no dejen de probar el dulce de leche de cabra y el mousse de maracuyá!!!!



L/D

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