Uruguay reafirma su compromiso en la lucha contra la explotación sexual infantil en el turismo
La delegación uruguaya participó en la 18ª Reunión Anual del GARA y firmó la Declaración de las Cataratas, renovando su compromiso con la protección de niñas, niños y adolescentes.
Por Jacobo Malowany para CIPETUR
Con una trayectoria de dos décadas de trabajo articulado en defensa de los derechos de la infancia, el Grupo de Acción Regional de las Américas (GARA) celebró su 18ª Reunión Anual en el marco del II Encuentro de Turismo Responsable. El encuentro tuvo lugar en las Cataratas del Iguazú, con la presencia de delegaciones de toda América Latina y el Caribe, representantes de organismos internacionales, y referentes del sector turístico y de derechos humanos.
La delegación uruguaya estuvo encabezada por la Directora General de Secretaría del Ministerio de Turismo, Florencia Ualde, quien junto a sus pares firmó la Declaración de las Cataratas, reafirmando un compromiso activo con la prevención de la explotación sexual de niñas, niños y adolescentes en el contexto del turismo y los viajes.
Esta declaración no es solo un gesto diplomático: representa un llamado urgente a la acción. Basada en instrumentos clave como la Convención sobre los Derechos del Niño, los Convenios 138 y 182 de la OIT, y resoluciones de la OEA, la declaración reclama la implementación efectiva de estrategias de prevención, formación continua para actores del sector público y privado, y campañas de sensibilización que involucren a la sociedad entera.
¿Qué es el GARA?
El Grupo de Acción Regional de las Américas (GARA) es una red intergubernamental nacida hace 20 años como respuesta a una problemática compleja y sensible: la explotación sexual de niños, niñas y adolescentes asociada a viajes y turismo (ESNNA-VT). Integrado por países de toda la región, su objetivo es coordinar políticas, intercambiar buenas prácticas y generar herramientas concretas para combatir esta forma de violencia, con un enfoque de derechos humanos y corresponsabilidad.
GARA ha sido clave en el desarrollo de códigos de conducta para el sector turístico, la producción de material educativo y la formación de alianzas con actores privados para erradicar esta grave violación a los derechos de la infancia.
Un llamado al sector turístico
Uno de los aspectos más relevantes de la declaración fue el llamado explícito a las empresas turísticas para adherirse a códigos de conducta responsables, fortalecer sus protocolos internos de prevención, y convertirse en aliados activos en la protección de la niñez. Hoteles, agencias de viajes, operadores turísticos, plataformas digitales y personal de transporte pueden ser —y deben ser— parte de la solución.
Una región unida por la niñez
Uruguay, al sumarse a la Declaración de las Cataratas, ratifica su compromiso institucional y ético con esta causa, entendiendo que el turismo no puede ni debe ser cómplice del delito. El país se une así al esfuerzo colectivo de construir una región donde la niñez esté protegida, informada y libre de toda forma de explotación sexual.




