Domingo, 08 Diciembre 2019

Primera Dama o Consorte de un país

Primera Dama - es una expresión que podría haberse creado a partir del s.XIX por el Presidente de Estados Unidos al pronunciar un mensaje fúnebre a su esposa, y desde entonces normas protocolares utilizan el término de referencia.

por Lic. Ma. Elisa Fernández Delgado

Figura protocolar

Ante las elecciones realizadas recientemente en Uruguay, además de los graves y grandes cambios ocurridos en este último tiempo en países de Latinoamérica, ha llevado a la par contar con nuevas figuras  en viejos cargos, entre estos papeles como el de primera dama por ser la encargada de acompañar al jefe de gobierno durante su gestión,  o el de esposo y consorte por ser quien acompaña a su mujer en el ejercicio de la Presidencia. En ambos casos, la figura de primera dama o de consorte las dos son cargos que no están estipulados en la Constitución; por tanto, a la hora de asumir como tal se convertirán en figuras de carácter protocolar dedicadas a atender en general el área social o de actuar en nombre del Presidente, son parte de las actividades que se les plantearán una vez que asuma el candidato electo.  

La figura se rige por normas estipuladas en manuales  de Protocolo, Etiqueta, y Ceremonial de Estado y/o de Relaciones Públicas, es un cargo que en su mayoría lo ocupa la esposa de quien gana una elección por mayoría de votos; pero la historia registra diversos casos donde se puede dar que el propio Presidente o jefe de gobierno designe a su esposa (pareja) o en su defecto a quien él revista en este papel, salvo que no exprese lo contrario habrá definido a alguien en dicho papel.

Resultará interesante conocer los motivos que inspiran el quehacer que cumple la persona que acompañará al Presidente durante su gestión, para dar crédito a su papel.

AntecedentesLos ejemplos son variados, en el caso del esposo de Margaret Thatcher (ex Primera ministra del Reino Unido) Denis Thatcher en su papel de consorte y cónyuge de una alta autoridad pública definió “always present, never there” (siempre presente, nunca visible) expresó, este es el papel en teoría que deberían asumir los hombres casados con mujeres de mayor rango, entendía que su papel como consorte de la primera ministra consistía en acompañarla pero sin interferir, y de hecho fue lo que hizo mientras su esposa estuvo en el cargo por más de una década. Surge la duda, si tal postura se podría sostener hoy en la práctica, puesto que podría no ser la que otros esposos en igual posición aceptarían cumplir al no contar con una ley que lo imponga, ya que se basan en reglamentos de Protocolo.

De todas maneras, las relaciones públicas  llevan un registro de los acontecimientos que se han dado a lo largo del tiempo, para actuar según las circunstancias que estan en consonancia con las  costumbres que forman parte del Protocolo de un país. En el caso específico de Uruguay, en el inicio de la gestión del gobierno del ex Presidente José Mujica se dio un hecho atípico que puso en cuestión el papel que debía asumir la esposa del Presidente ya que lo habitual -hasta entonces-  había sido el de una primera dama dedicada a tareas sociales en nombre del Presidente, como la Prensa no  esperaba que tal figura quedara acéfala,  la señora del Presidente electo Lucía Topolansky  y senadora de la República, debió brindar una explicación en una rueda de Prensa por su postura “no es una figura reconocida por la Constitución y por tanto no obliga a asumir un papel que no existe” expresó.

Es de recibo comentar que la figura de primera dama, es un papel aceptado internacionalmente e impuesto en diferentes Estados del mundo, donde la mayoría de las señoras de los Presidentes electos lo asumen, y una minoría respetable decide que no hay porqué. En el resto del mundo, tampoco se introduce en sus Constituciones la figura de consorte, o de primera dama pero de alguna manera estará presente en las normas de Etiqueta, Protocolo y Ceremonial de los Estados puesto que es útil para relacionarse  entre todos.

La figura de esposo “consorte”

-Corona inglesa

Esta figura es habitual que se asuma en las diversas coronas existentes en el mundo, sobre todo, cuando aún hoy  varios son los príncipes consortes. Uno de los más antiguos en el cargo, es el príncipe Felipe - duque de Edimburgo, esposo de la reina Isabel II de Inglaterra, quien debió renunciar a su origen greco-dinamarqués para asumir la ciudadanía inglesa de su esposa una vez que se casaron.  En este caso, es ella  la reina quien le posibilitó acceder al nuevo cargo, y ha sido la corona inglesa la encargada de designarlo con el cargo de duque de Edimburgo.

-Corona danesa

Otro ejemplo de consorte  no a fin al protocolo, es el caso del príncipe Enrique esposo de la reina de Dinamarca. De acuerdo con el protocolo danés, el príncipe consorte y esposo de una  reina tiene precedencia sobre el príncipe heredero e hijo de ambos mientras sea menor de edad, pues a futuro será el sucesor de la  reina  y quien gobernará el territorio danés. Pero, mientras el príncipe no alcance la mayoría de edad quien lo suplantará en los actos oficiales será su padre, el esposo de la reina y una vez que llegue a la mayoría de edad será el heredero de la corona danesa. En definitiva el  hijo de la reina es quien la sustituirá durante sus ausencias e impedimentos en actos protocolares, y  cuando ella lo disponga.

Tiempo atrás, durante una recepción que ofrecía el Palacio Real de Amalienborg  (Copenague) al enfermarse la reina Margarita, ella designa a su hijo para que la representara, según lo establecido por ley. El consorte se sintió tan humillado que en esa oportunidad abandonó la casa real. Este hecho no pasó desapercibido para la Prensa y en una entrevista que le realizaron argumentó “Después de tantos años de ejercer el papel de número dos en Dinamarca, no me agrada pasar súbitamente al número tres. En Dinamarca el primer hombre soy yo, no mi hijo…”.  El tema lo concluiré con la siguiente nota: Enrique es el príncipe consorte y esposo de la reina, no es el heredero de la corona. En su postura y posterior declaración faltó conocimiento de Protocolo y de la ley vigente en su país.

 *ex Presidentes en su papel de consortes

Se podría afirmar en este caso que al dejar de ser Presidente, no debe actuar como si aún lo fuera:

*Estados Unidos: Interesante podría haber sido -de haberse dado- cuando la candidata de Estados Unidos Hillary Clinton se postulaba a la Presidencia de su país ¿cuál sería el papel del esposo al haber sido ex Presidente?  Podría asumir que seguiría con el mismo trato con otros Presidentes o se replegaría al papel de consorte (¿?) la duda está...

*Argentina: cuando asumió la Presidencia Cristina Fernández, el Presidente saliente era Néstor Kirchner, su esposo. Del mismo modo y luego del acto de asumir la Presidenta, él en el mismo momento asumió el cargo de primer damo - consorte republicano o primer caballero (el último término corresponde a la denominación en el Protocolo argentino). Es decir, en el momento que hizo entrega de la banda presidencial a su electa esposa, pasó del primer lugar de importancia (Presidente) al sexto (consorte).  Donde el primer caballero debería caminar un paso por detrás  y a la izquierda de su excelencia la Presidenta, pero en este caso no hay duda que no ocurrió (ver foto siguiente) el esposo camina junto a la Presidenta impuesta y su hija es quien sostiene el bastón de mando…

Títulos de primer caballero en el mundo

La figura de primera dama

*Si no se ocupa ese cargo es el Presidente quien lo dispone e informa

Se han dado hechos específicos en donde el mandatario se expide al respecto de quién ocupará el papel o puede suceder que no sea así y nadie será reconocida para ejercer como primera dama durante su gobierno. Esto se realiza en general en los primeros días luego de asumir el Presidente. El caso particular de “no tener representación de primera dama” la declaración le corresponde al Presidente quien informará a los ciudadanos;  los ejemplos más recientes los han dado los Presidentes  de Bolivia Evo Morales (hasta hace poco);  Rafael Correa de  Ecuador (en su momento) y de Rusia Vladímir Putin (hasta la fecha).

*Si el Presidente decide que el cargo lo ocupará un familiar

También hay mandatarios que deciden que la figura de primera dama lo será por  designación directa, y el cargo será ocupado… en este caso por una de sus hijas. Tal lo que ocurrió en Argentina y, en Perú dos países de Latinoamérica. Décadas antes se había planteado ídem situación  en Italia y Turquía.  Quien ocupó este papel, en el primer caso, fue una hija, Zulema Menem y así lo implementó durante su primer gobierno Carlos Saúl Menem en Argentina; marcó un antecedente en el país porque no asumió su esposa de quien estaba separado. Por otro lado y en el mismo orden, aconteció  algo similar en Perú durante el gobierno del Presidente Alberto Fujimori, él designa a una de sus hijas, Keiko Fujimori quien ocupó el cargo de primera dama y no su esposa de quien estaba separado.

El papel de primera dama

Existe variedad en las formas de accionar una primera dama. Se reitera que esta figura no es obligatoria pero ayuda a la imagen y tareas de un Presidente. Existen al menos dos motivos que lo fundamentan: el primero refiere a que la señora de un Presidente electo no se presta a ser elegida; en segundo lugar, tampoco obtiene un cargo para ocupar por mayoría de votos, como sí ocurre en el caso de su cónyuge.  De todas maneras, en cuanto asuma su esposo la Presidencia  será  tratada como tal   –primera dama del país- en tanto normas Protocolares, de Etiqueta y de Ceremonial de Estado las que son estipuladas por el propio Estado, sin ser incluidas en la Constitución.

La posición de primera dama no es un cargo electivo, no posee obligaciones oficiales, y tampoco percibe salario, sin embargo, ella participa de numerosas ceremonias oficiales junto o en representación del Presidente. Es la primera dama quien realiza actividades de diversa índole social y benéficas en nombre del Presidente, también lo acompaña en delegaciones oficiales, en viajes al extranjero, además de recibir a los visitantes que llegan al país, entre otras tareas. La primera dama tampoco tiene funciones ni responsabilidades asignadas, ni autoridad sobre otras personas ni se le asigna compensación; pero debe cumplir ciertas funciones de carácter protocolar en recepciones oficiales o ante personalidades ilustres.

En las recepciones oficiales se les asigna el lugar que equivaldría al de las reinas consortes y, de acuerdo con el protocolo de consortes y acompañantes ocupan el consecutivo al de su pareja. En caso que acudan de acompañantes a un acto académico o cultural y no se les haya invitado a formar parte de la presidencia igual deberían invitar a ocupar un lugar destacado. En los actos a los que acudan sin consorte, dada su posición lo harán en condición de invitadas de honor, por lo que queda resuelto el problema de su  ubicación. En los EEUU es por tradición  e imprescindible que el candidato esté casado al llegar a la Presidencia, en otros países como Uruguay  no ocurre lo mismo, por lo que se pueden dar situaciones en las que el papel de primera dama lo deba asumir otro miembro de la familia presidencial, o que simplemente no se lo reconozca y no exista.

Antecedentes históricos de cómo surge la figura de primera dama

La leyenda recoge que el término “primera dama”  luego de aquella instancia señalada al inicio de este artículo, ha sido tomado por el periodismo de Estados Unidos desde fines del siglo XIX hasta que se generalizó su implementación a partir de una obra de teatro norteamericana “The First Lady in the land” en 1911 (La Primera Dama en la tierra) resultó ser una obra muy exitosa del momento. Décadas siguientes (1947) dio un giro el papel tradicional que asumían las  primeras damas porque consistía en acompañar al Presidente a eventos  y ceremonias de etiqueta con autoridades. El cambio si se quiere de imagen y de actividades se dio a partir de las múltiples actividades que realizaba la esposa del Presidente Flanklin Delano Roosvelt, señora Eleanor Roosevelt,  activista en asuntos sociales de su país y practicante de las mismas desde el inicio de la gestión de su esposo  e inclusive continuó trabajando hasta luego que falleciera para cumplir con las tareas emprendidas.

Durante el mandato de su esposo  decía que todo lo que hacía era en nombre del  Presidente Franklin Delano, como vocera del mandatario.  Pero en realidad este papel  de  señora del Presidente fue mucho más allá de lo protocolar que hasta entonces se daba. Hablaba en conferencias, negociaba por los derechos de las personas desposeídas; entre varias tareas que fue asumiendo para demostrar que una primera dama podía ser algo más que la esposa de un Presidente, algo más que el sostén de la casa familiar, ya que se podía ocupar, y de hecho lo hizo, de los derechos humanos, de las causas de los niños y de las mujeres,  de los problemas de las minorías de su país...

Por lo expuesto, el primer país en utilizar el título de primera dama parecería ser que fue Estados Unidos, hay una segunda versión que plantea cuando se fundó este país, el  Presidente se encontraba sin un título adecuado para su esposa, por lo menos debía ser el equivalente al de las monarquías europeas, algo similar al de reina consorte, pero en este caso ninguno de los títulos usuales correspondía a su posición, por tanto debió crearse el perfil de primera dama y más tarde se extendió a otras Repúblicas.

Demás está aclarar ante ejemplos contemporáneos de primeras damas que este título no ha sido generalmente aceptado por las mismas "primeras damas" quienes, aún son las que eligen la forma de cómo les gustaría ser tratadas, por tales motivos sentir títulos como "Lady", "Mrs. President" era lo usual.  Por ejemplo Martha Washington era llamada "Lady Washington".

Según se recoge en la reconstrucción del término, Dolley Madison ha sido la "primera dama" en ser nombrada como tal (1849) pues en el día de su funeral, su esposo y Presidente Zachary Taylor, hizo un panegírico para su esposa, lamentablemente no hay constancia del escrito.  A partir de ese año este título comienza a ser más utilizado, sobre todo, en los círculos sociales de Washington D. C., y se ha documentado por escrito desde el 3/11/1863 cuando el diario de William Howard Russell se refirió a los chismes que provocó la obra de teatro  "La primera dama en la Tierra" de gran éxito.

El primer título que realmente ganó el reconocimiento nacional (1877) se dio cuando la periodista gráfica María C. Ames se refirió a Lucy Webb Hayes como "La primera dama de la tierra", durante la presentación de informes sobre la inauguración de Rutherford B. Hayes. La señora Hayes fue una primera dama popular, y los informes frecuentes sobre las actividades que realizaba son las que difundieron el término y su uso fuera de Washington. Un papel cómico popular desempeñado (1911) por el dramaturgo Charles Nirdlinger titulado La primera dama en la Tierra había popularizado el título y ya para la década de 1930 el término se propagó y se lo utilizó popularmente fuera de los Estados Unidos.

El acrónimo FLOTUS a veces se utiliza para denominar a la "primera dama de los Estados Unidos", por analogía a la sigla "POTUS" que designa al "presidente de los Estados Unidos". En EEUU también se usan los términos First Couple (primera pareja) y First Family (primera familia) para mencionar a la primera dama del país.

Modelos de Primera Dama

La primera dama en los Estados Unidos siempre ha formado parte de la actividad política, por ejemplo en 1877 Lucy era la señora del Presidente Rutherford B. Haynes,  quien además de ser la primera dama, era quien definía su propia agenda y quien conducía un plan de acción social autónomo.  También, en este país las señoras de los gobernadores se consideran primeras damas del Estado en el cual gobierna su esposo. En el caso de California, la designación de primera dama se establece hasta con diplomas y documentos oficiales de Estado.

Hay diferentes formas de ejecutar el papel de primera dama (o consorte) y se pueden distinguir por lo tanto diferentes modelos de esta figura, es decir, las hay intelectuales, familiares, mediáticas, pero también hay otras que con el tiempo descubren su beta política (Cristina Fernández, Hillary Clinton,…);  las que se definirían como promotoras sociales (Eva Perón de Argentina realizaba obra social pero esto no la eximía de cubrir su cuerpo con pieles y joyas), hay otras primeras damas más refinadas (Julia Pou de Lacalle o Mercedes Menafra de Batlle), periodistas (Jacqueline Bouvier de Kennedy; Letizia Ortiz de España), pueblerinas,  o profesionales (Dra. Marta Canessa de Sanguinetti), modelos o artistas (Carla Bruni actriz, cantante y de origen italiano se convirtió en la segunda esposa de Sarkozy cuando fue Presidente de Francia; Melania de Trump modelo  oriunda de Croacia (sin embargo su esposo persigue a los inmigrantes en EE.UU)

También las hubo, y habrá amas de casas como la reciente desaparecida María Auxiliadora Delgado esposa del doctor Tabaré Vázquez, quien cuidaba de su hogar, de los hijos y nietos, además de cumplir con tareas sociales pues ella implementó en escuelas públicas el cuidado de salud bucal y servicio oftalmológico para todos los niños. Tareas que realizaba con muy bajo perfil público y en total anonimato, como lo recordó cuando falleció el edil por Montevideo y ex intendente Arq. Mariano Arana “yo la veía barriendo la vereda, como lo hacía mi madre, y era la señora del Presidente ¡Algo increíble!”  la recordó consternado...

Dentro de los modelos de primera dama,  recuerdo el caso de las hijas de los presidenciables, como el de Zulemita Menem de Argentina, quien se destacó en su papel de primera dama por los abultados gastos que realizaba de vestimenta y en sostener con fondos públicos a múltiples asesores personales durante visitas oficiales al extranjero o en el recibimiento de autoridades al acompañar a su  padre.

A lo largo del siglo XX, muchas mujeres han tomado un rol activo y más protagónico. Realizan campañas de apoyo al Presidente, como ejemplo traigo a colación a Hillary Rodham Clinton, la esposa de Bill Clinton. Durante un tiempo se le dio un empleo formal para que desarrollara la reforma del sistema de salud. Posteriormente, se convirtió en senadora por la ciudad de Nueva York, y es la única esposa de un ex Presidente que ha sido elegida como representante en el Congreso; además ha sido una de las candidatas destacadas en las elecciones presidenciales de 2008 y 2016.

Reglas de Etiqueta y perfil de primeras damas según cada Estado

Las reglas de etiqueta abarcan la mayoría de los aspectos de la interacción social de  cualquier sociedad, pueden reflejar un código ético subyacente o los modales de una persona o hasta de un Estado. Por lo general no están escritas, pero se han codificado aspectos generales en los siguientes países:

-Estados Unidos, la primera dama tiene una oficina en la Casa Blanca, más de una decena de empleados a su servicio y un presupuesto que supera el millón de dólares para llevar adelante las causas sociales de su interés, atender a la Prensa y organizar su agenda. Michelle Obama no fue sólo la primera dama de Estados Unidos, también formaba parte de un relato político presente de su país.

-Ecuador, el ex - presidente Rafael Correa eliminó durante su mandato el cargo de primera dama como representación pública. Desde que tomó tal decisión, el gobierno de su país se abstuvo de participar en las convocatorias internacionales que se realizan por esta función. Correa fundamentaba su eliminación por considerarlo “un cargo sexista”, “un anacronismo impuesto por los protocolos internacionales” y porque la “persona casada con un presidente no debe tener derecho a asumir funciones de Estado ya que no ha sido electa” declaró.

-Uruguay, aparte de restarle importancia y mérito durante la gestión del Presidente Mujica a esta figura, en el resto de los gobiernos los Presidentes contaron en general con sus esposas para realizar, en su nombre, diversas tareas sociales, actualizar las residencias  de la Presidencia, acompañar al Presidente en actividades de representación oficial.

-Argentina, cuenta en su haber la fórmula Presidencial que denominaron Perón –Perón. Estaba integrada por el ex General Perón y su segunda esposa en el cargo de vicepresidenta, Isabel Martínez de Perón. Cuando fallece el Presidente Perón, la vicepresidenta y primera dama se designa como la heredera legítima del cargo de su esposo. El caso ocurrió y el legado de la Presidencia lo asumió esta persona totalmente ajena a la política.

Durante la Presidencia de Néctor  Kirchner, Cristina Fernández  la señora del Presidente,  no le gustaba que la llamaran primera dama sino “primera ciudadana” calificativo que nació con la Revolución Francesa...

-Europa.  En este continente sucedió lo contrario con las primeras damas y su actividad. Durante décadas su papel consistía en ser una figura discreta que ayudaba a su esposo en la casa,  pero no lo acompañaba en ceremonias públicas, tampoco desempeñaba un papel relevante en la vida política del país.  Recién en la segunda mitad del siglo XX, cambia el papel de la mujer quien pasa a ser la señora del jefe de Estado y suma su participación en la vida pública y social de las sociedades europeas, obviamente esta etapa coincide con la emancipación de la mujer a nivel global, ingreso al mercado laboral, hacer algunas intervenciones en la vida política y en la actividad social, entre otras actividades nuevas en su género.

Qué refleja ser la primera dama de un Estado

En principio y en general en las Repúblicas  es una designación coloquial, utilizada sobre todo por los medios de comunicación social. Hay entendidos que sugieren su equiparación al título nobiliario que se otorga junto al certificado de casamiento. También, podría ser el equivalente  republicano al de reina, aunque no se certifica por escrito en general. En tiempos contemporáneos, es el propio Presidente quien requiere que la primera dama se ocupe en su nombre  y en su representación de aquellos espacios a los que él a falta de tiempo muchas veces le es imposible asumir. La primera dama, también debe pronunciar discursos y representar funciones que consoliden el estatus, poder y popularidad de su esposo el Presidente.

Portugal - La importancia protocolar de la primera dama, legalmente establecida, se extiende en Portugal “a los cónyuges de las altas autoridades públicas, o a quien viva con ellas en unión de hecho, al ser invitadas para una ceremonia” pública  con la salvedad que establece la ley  de no poder ser sustituidas ni representadas. En este caso, la Ley Portuguesa de Precedencias establece equiparaciones,  le será “atribuido un lugar equivalente a las mismas cuando las acompañan”; “con el fin de brindar apoyo al cónyuge del presidente de la República en ejercicio de actividades nacionales que normalmente desempeñare”,  también cuentan cuando funciona como tal en el ámbito de la Casa Civil (del Presidente) un Gabinete de Apoyo constituido por dos adjuntos y un secretario. En Portugal, la primera dama, cuando concurre sola a un acto público, ocupa una posición destacada y la principal, por ser la mujer del Presidente  ya que en la práctica lo sustituye o representa.

Estados Unidos o Brasil - En países democráticos y republicanos como los señalados, cuentan en el sitio oficial de Presidencia con la denominación de primera dama para designar a la señora del Presidente, como si fuese un título en términos de una ley que no existe pero que se le da a la mujer del Presidente americano o del brasilero, ya que en este sitio oficial de Presidencia de la República Federativa del Brasil, la mujer del Jefe de Estado es tratada como primera dama. Por tanto, la primera dama​ es en algunos Estados la mujer o cónyuge del titular del Poder Ejecutivo o alguien que cumple dicha función en ceremonias oficiales. En caso de que el cónyuge sea un hombre, recibe el título de primer caballero.

México, el 27 de mayo de 2018, en plena campaña electoral, Beatriz Gutiérrez Müller, esposa del entonces candidato y ahora presidente Andrés Manuel López Obrador, dijo en un mitin político en Veracruz que no usaría tal título cuando su marido fuera mandatario y explicó:  "Para la verdadera transformación de la vida pública de México, tenemos que comenzar a pensar y actuar diferente. Pongamos fin a la idea de primera dama. En México no queremos que haya mujeres de primera ni de segunda". "Con todo respeto a las mujeres que han estado antes en ese papel, decir primera dama es algo clasista".

Primera dama de los Estados Unidos (First Lady of the United States) es un título no oficial de la anfitriona de la Casa Blanca. Como este rol es tradicionalmente ejercido por la esposa del presidente, el título a veces se utiliza para referirse únicamente a la esposa del presidente en ejercicio.  La primera dama actual es Melania Trump, desde la toma de posesión de su esposo el presidente Donald Trump, el 20 de enero de 2017.

Conclusión

Hoy por hoy, ha crecido el protagonismo de la primera dama, sea esto a nivel de la vida pública como también de la vida social de un país o Estado, por tanto debería justificar persé   la construcción y definición de una normativa, y la construcción de una estructura mínima que ayude a desempeñar las distintas tareas que le son confiadas o que se entiende le correspondería realizar en nombre del Presidente o porqué no en su nombre propio para dejar de ser una figura de Etiqueta y Ceremonial y ser reconocida sus actividades en el área social del país.

Las normas protocolares son necesarias para el relacionamiento y funcionamiento entre los diversos Estados, permiten que se rijan por ellas los países, instituciones y autoridades de manera de contemplar diversos aspectos. En la mayoría de los países que lo practican, les permite cierto orden con criterio amplio para atender diferencias culturales que existen entre los Estados del mundo.

publicado en http://laserenadeloeste.com

foto de portada: Foto de familia de Primeras Damas durante Cumbre del G20 (2014)

galería de imágenes: 1.- “Primeras damas” Bella Kocharian (Armenia), Laura Bush (Estados Unidos), Lyudmila Putina (Rusia) y Zorka Parvanova (Bulgaria) Book Festival. Moscú, 1.10.2003. (Fuente: Wikipedia). 2.- Cristina Fernández de Kirchner. 3.-  Melania Trump. 4.- Rosalynn Carter, Sen. Hillary ClintonBarbara Bush y la primera dama Laura Bush en el Parque y Centro Presidencial William J. Clinton, 2004.

 

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